Psicología y salud
Todas las experiencias emocionales desde la más tierna infancia nos marcan, nos dejan su huella.
La mayor parte de ellas son inconscientes, no las podemos recordar, ni tan siquiera sabemos que existen.
Sin embargo, esa huella se hace presente a lo largo de nuestra vida.
En ocasiones, nos sentimos mal y el origen del malestar está en emociones vividas en la infancia.
Puede ocurrir que seamos conscientes de malas experiencias emocionales en la infancia, y que racionalmente creamos haberlas superado, sin embargo, cabe la posibilidad de que su huella siga generando sufrimiento emocional inconscientemente.
Para ello, tenemos que explorar nuestras emociones, desde la más tierna infancia, y sanarlas.
Permitiéndonos su expresión, su aceptación, su perdón, transformando así el dolor en Sanación emocional, curando las huellas que fueron quedando ocultas a través del tiempo.
Dolores Rizo.
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